A todos nos ha pasado alguna vez que nuestro coche nos ha dejado tirados, lo que es muy frustrante si tienes prisa o estas muy lejos de cualquier taller. Este tipo de incidentes se pueden evitar, si se realiza un mantenimiento básico y regular del vehículo. Este mantenimiento regular también permite predecir problemas graves, ya que se pueden encontrar algunas pequeñas señales, que de normal, no veríamos hasta que se conviertan en averías más serias.
La importancia de un buen mantenimiento no solo radica en evitar averías, sino que además, es vital para la seguridad propia y de terceros, ya que un vehículo en mal estado puede producir un accidente.
El motor es uno de esos elementos importantes. Este es el corazón del coche por lo que necesita un uso regular, la falta de uso es uno de los principales causas de problemas en el motor. Cuidados básicos son el control del aceite en el motor, al nivel de agua en el radiador y la limpieza y chequeo de la batería. Para realizar esto no es necesario tener conocimientos de mecánica, pero si lo realiza un profesional, su experiencia le permitirá detectar señales que a ti te pasarían desapercibidas.
Los frenos son otra de las partes del coche también deben ser parte del mantenimiento básico del coche. Es vital el nivel del líquido de frenos y el estado de las pastillas. La falta de líquido hará que no frene bien y las pastillas sucias o desgastadas, harán que chirríen, en definitiva, tu coche no frenará bien y el riesgo de colisión aumenta. Por eso es recomendable que se encarga un profesional, que sepa cuando es el momento de sustituir las pastillas o los discos.
Otro punto que no puedes dejar pasar son los neumáticos. Lo aconsejable es que una vez al mes revises la presión, ya que es vital para el correcto agarre del coche a la calzada. Hay que tener en cuenta que la presión va disminuyendo con el tiempo.
También debe controlarse el estado de los limpiaparabrisas, que las escobillas estén en buen estado y que tengan agua para limpiar, ya que de lo contrario, las dificultades de conducir con lluvia se multiplican si la visibilidad es mala. El agua también es importante, porque al usar los limpiaparabrisas podemos encontrarnos con que no hay suficiente agua y los cristales se queden muy sucios por tierra, barro o cualquier otra elemento que dificulte la visibilidad.
Los faros también debemos revisarlos en nuestro mantenimiento básico, no seriamos los primeros que circulamos son un faro fundido sin darnos cuenta. También la correcta alineación de los faros para que alumbre donde tiene que hacerlo cuando circulamos en la oscuridad.
Es importante que confiemos en un profesional para realizar este mantenimiento básico periódico de nuestro vehículo, ya que no sólo nos aseguramos de que se ha realizado correctamente, si no que además, puede encontrar indicadores de alguna avería, que cogida a tiempo será mucho más leve, lo que nos ahorrará dinero.
Otro aspecto del mantenimiento básico de nuestro coche que debemos tener en cuenta, es que debemos llevar el coche al taller cuando detectemos algo extraño en el su funcionamiento, porque retrasarlo no hace más que agravar la avería.